Padre Domingo Milanesio. Misionero. Fundador. Escritor . Mediador. 1843 - 1922.

         Biografía del Padre Domingo Milanesio.
      Domingo Milanesio, nació en Turín, Italia Settimo Torinese, el año 1843, llegó a Buenos Aires en 1877, enviado por Don Bosco. Se inició en La Boca, once años después fue destinado Párroco al poblado de Viedma, vecino de Carmen de Patagones, única parroquia en La Patagonia desde el Río Negro hasta Tierra del Fuego.
       Todos los habitantes de estas inmensas regiones, eran aborígenes con algunos criollos, a excepción de los Galeses de Chubut, en Gaiman. Visitaba las tolderías con muchas dificultades y privaciones, trataba de comunicarse con los nativos sin temor de ser asesinado o perderse en el desierto, solo con la confianza en Dios. Milanesio a caballo predicaba el Evangelio y bautizaba a quienes le creían, permanecía unos días entre ellos, padeciendo todas clases de privaciones en relación a la comida, agua y ropa.
         En estos años Milanesio hablaba y entendía muy bien el Tehuelche, por   el talento de su prodigiosa memoria y atención. Publicó un libro de gramática y lengua aborigen Tehuelche, Araucana y Patagónicas en general, “Toponimia Araucana”, que mereció numerosos elogios el año 1914 y 1918.
       En 1882 conoció al Cacique Namuncurá, quien huía siempre del acecho del general Roca. Una embajada del cacique llegó hasta la casa de Milanesio con el fin de “entablar conversación y hacerle saber su intención de rendirse al gobierno nacional”.
       El Padre Domingo lo “hizo saber a las autoridades y hubo una reunión, en forma muy persuasiva y bondadosa; el cacique y su gente se rindieron a  las fuerzas del gobierno en 1883. Namuncurá recibió el grado de Coronel del Ejército Argentino y recibieron tierras en propiedad”. En 1888 el Padre Domingo Milanesio, bautizó a su hijo Ceferino.
      “Fatigado por tantos sacrificios su cuerpo quedó debilitado y falleció a los 79 años en Bernal en 1922”. (Cfr. Los italianos. Exposición de Turín. Pág.353. - Diccionario Italo Argentino. Autores: Dionisio Petriella y Sara Miatello).
       Primeros Misioneros Salesianos.
      El segundo grupo de los primeros Misioneros enviados por Don Bosco, en noviembre de 1877 estaba compuesto por Don Costamagna, Don Vespignani, Don Milanesio y las primeras Hijas de María Auxiliadora; sobre un total de diez envíos de Misioneros Italianos. 
                                                        

                              El Primer grupo de Misioneros Salesianos, en Turín junto a Don Bosco  con el General Julio Argentino Roca.

       Para contrarrestar el predominio masónico en La Boca, llegó en 1875, procedente de Génova, la primera Misión Salesiana encabezada por el Padre Juan Cagliero, quien se hizo cargo con este objetivo, de la Parroquia de San Juan Evangelista, cuya primera capilla de madera había sido erigida en 1859.
        “Esta primera Misión Salesiana había sido concebida por Don Bosco para evangelizar la Patagonia, pero la alarma de la Iglesia Católica ante la situación del barrio -en lugar de Boca del Riachuelo la llamaban, paródicamente, “La Boca del Diablo”- el arzobispo de Buenos Aires, Monseñor Aneiros, les confió la parroquia vacante, primera en el mundo en ser gobernada por los salesianos”. (Cfr.Historia de las Misiones Salesianas. Padre Raúl Entraigas.  Padre Cayetano Bruno.)
        El Barrio de la Boca a fines del S. XIX.
     Los salesianos relacionándose con el castellano e el italiano, en 1878, instalaban, aledaña a la capillita de madera, una Escuela Primaria a cargo del Padre Domingo Milanesio, quien también consiguió autorización para enseñar religión en las escuelas estatales de La Boca y Barracas. La asunción del padre Esteban Bourlot como párroco, en 1879, significó una etapa de múltiples obras y crecimiento: ese mismo año creó en Olavarría 637, en un edificio alquilado y frente a la Unión de La Boca, el Colegio Madre Auxiliadora; en 1882 la organización parroquial “Hijas de María”, que se sumó a las ya existentes cofradías “Virgen del Carmen y Sagrado Corazón”; en 1884 fundó la Sociedad Católica de Socorros Mutuos, que se transformaría en 1939 en el “Círculo Católico de Obreros”, cuya extensión llegó a Rosario con el Maestro Carlos Conci.
      Los Salesianos inauguraron en 1886 el templo definitivo en Olavarría 486; editaron y publicaron en 1892, el periódico, Cristoforo Colombo, que 20 años después editaban  en Rosario; fundaron en 1894 la Asociación Juventud Católica con su propio “cuadro dramático, orquesta y coro”. Este núcleo de religiosos, tendrá decisiva participación en la creación del Noviciado Salesianos de Bernal, junto con su parroquia Nuestra Señora de La Guardia;  en los límites de La Boca, en Australia casi Patricios,  la iglesia de San Pedro, para la cual Américo Bonetti tallará una Mater dolorosa”. (Cfr.Padre Raúl Entraigas y Padre Cayetano Bruno).
       En 1879 el General Roca emprendió “la Conquista del Desierto”. Los puestos de la inmensa Patagonia se abrían a los Misioneros Salesianos, quienes crearon dos centros Misioneros: uno en Patagones a cargo del  Padre José Fagnano  y el otro en Viedma a cargo del Padre Domingo Milanesio. Pero éste se dedicó a las cabalgatas apostólicas recorriendo a caballo  las zonas inhóspitas de la Patagonia. Por entonces, los aborígenes se agrupaban por tribus al mando del Cacique Manuel Namuncurá. En 1883 estalló la rebelión de los aborígenes. ¿Cómo evangelizar en estas condiciones? Don Milanesio fue elegido como: “El  Mediador de las partes”. (Cfr. Padre.Pascual Paeza. “Patiru Domingo”. Págs..-127.140- Año 1964.)
        Alumno aborigen destacado
       “En1887, con un año de edad, Ceferino se salvó de perecer ahogado en el Río Negro, mientras jugaba en sus orillas. El año 1888, el 24 de Diciembre en vísperas deNavidad el Misionero Salesiano PadreDomingo Milanesio “defensor de los pueblos originarios”, bautizó a Ceferino Namuncurá. El acta del Bautismo se encuentra en la Parroquia de la ciudad de Carmen de Patagones, extremo sur de la Provincia de Buenos Aires, a cuya jurisdicción pertenecía todo Río Negro.
     El Padre Milanesio, en aquellos largos viajes, que realizaba por Río Negro, misionando, le enseñaba también al joven Nicolás Esandi, latín, con el fin de ser sacerdote.
             Beato Ceferino Namuncurá. Patagonia Norte, Chimpay, R;io Negro.
       Este niño en la escuela, a los 11 años  pidió al Padre Domingo Milanesio, considerado como el gran "Apóstol de los aborígenes Mapuches",  “que lo llevara a estudiar para luego regresar y así enseñar a los niños y habitantes de su pueblo”. (Cfr. Raúl Entraigas.Misioneros Salesianos).
         El Cacique Manuel Namuncurá fue promovido a Coronel del Ejército Argentino. Uno de sus hijos - Ceferino nacido en Chimpay  - Río Negro- fue alumno del Colegio Pío IX de Buenos Aires.
           El primer Vicario Apostólico Juan Cagliero, el cual había sido consagrado Obispo el 7 de abril de 1884, con el fin de premiar su esfuerzo y estimular su vocación religiosa, acompañó a Roma al joven Ceferino. Allá estudiaba como Seminarista, sabía italiano y latín. Ceferino vive en Frascati, en un amplio colegio rodeado de árboles, paisajes y finalmente contrajo neumonía y falleció en Roma a los 19 años.
         En 1973 el Papa Paulo VI declaró a Ceferino "Venerable Siervo de Dios". El Papa Benedicto XVI firmó el decreto sobre el milagro de curación atribuido a la intercesión del venerable Ceferino, este fue el camino rumbo al altar. Fue beatificado el 11 de Noviembre de 2007 por Benedicto XVI. Fue delegado Papal,  Tarcisio Bertone, en la localidad de  Chimpay, Provincia de Río Negro, Argentina.
Los  Sueños Misioneros de Don Bosco le mostraron La Patagonia.

                       Don Bosco soñador, envió a sus religiosos; pero nunca viajó a la Argentina.
         En la vida de Don Bosco aparecen  los “sueños” que fueron marcando su destino final en la vasta obra del santo fundador. Según datos fidedignos de su biografía: “Las Memorias Biográficas de Don Bosco”, escritas por Don Lemoyne, leemos:
       1.- “El primer “sueño de los 9 años” usando el método de la bondad y de la mansedumbre.
         2.- El segundo sueño, Don Bosco lo tuvo la noche de la Fiesta  de Santa Rosa de Lima con respecto a la Patagonia y los Andes de Argentina y de Chile, en él recibió indicios del país de su deseada acción de evangelización a favor de los paganos. En un plano vio asesinar a un grupo de misioneros brutalmente,  Nicolás Marcadi y Francisco de Elgueta, - Gutiérrez-. Luego vio a otro grupo de misioneros alegres que estaban catequizando a los niños y allí Don Bosco “reconoció a sus Misioneros Salesianos.
         El sueño lo conducía,  sobrevolando y “veía las riquezas y el porvenir de América. Se encontraba él viajando en un ferrocarril y vio los futuros progresos y riquezas de este continente. Llegó hasta Punta Arenas. Bajaron. El suelo estaba lleno de depósitos de carbón fósil, de grandes montones de metal pulido y en bruto”. A una pregunta suya le respondió su acompañante: “Lo que ahora es un proyecto, será un día realidad”.
       3.- Un tercer sueño misionero  tuvo Don Bosco el 31 de enero de 1885; “le pareció que sobrevolaba en un vehículo misterioso por las regiones de América latina. Desde arriba observaba a los salesianos de aquel tiempo y los del  futuro trabajando en la educación y en la evangelización de estas tierras de América. Vió a Mons. Cagliero, a Mons. Benito Cruz y a Mons. Ramón Astorga. Es muy notable el interés de Don Bosco por Chile en esa época. En una carta a Mons. Cagliero le dice: “Recuerda que Chile mira a los salesianos y que los salesianos miran a esa nación amigablemente”. En ese sueño Don Bosco sale de Santiago y vuelve otra vez a Santiago, pero pasando por las ciudades de Buenos Aires, San Pablo, Río de Janeiro, Ciudad del Cabo, Madagascar, Golfo Pérsico, Mar Caspio, Ceilán, Hong-Kong,  China, Australia e Islas Diego Ramírez”.
        4.- El ultimo sueño misionero de Don Bosco es el que tuvo en Barcelona, el 10 de abril de 1886  actual Colegio de Sarriá donde existe un pequeño Museo. “Vio una inmensa grupos de jóvenes que corrían hacia él” y le decían: “Te hemos esperado tanto y ahora ya no te escaparás”- Uno le dijo:- “¿Qué ves?” – Don Bosco respondió: – “Veo montañas, mar,  colinas y más montañas  y mar”. Leo un cartel: “Valparaíso, otro que dice Santiago y unos niños leían Pekín”. Y una doncella dijo: -“Tira una línea de Santiago a Pekín- pasando por el centro de África- y tendrás una idea de lo que deberán realizar tus salesianos. Pero, para  realizar estos los salesianos deberán cultivar al amor a Maria”.  -(Cfr. Memorias Biográficas de Don Bosco. Juan Lemoyne. Turín.1900).
         El cuaderno, Diario de Marcha y los vocablos aborígenes.
El Padre Domingo Milanesio, italiano, se encargó  en soledad, de descifrar el idioma de los aborígenes, ordenar alfabéticamente los vocablos, usos de armas, herramientas; la interpretación de gestos, sonidos guturales, sistematizó la región con dibujos y mapas, al final publicó un libro denominado: "Etimología araucana. Idiomas comparados de la Patagonia. Lecturas y frasario araucano", 1914 y 1918. Allí explicaba: “el apellido Namuncurá, mapudungum «pie de piedra»; namun, pie, y cura, piedra, significaba «alguien firme, decidido”. El vocabulario de ese libro fue posteriormente perfeccionado por algunos filólogos estudiosos del tema, pues Milanesio conocía sus dudas de este idioma enigmático y gestual”. (Cfr. Raúl Entraigas. Misioneros Salesianos).
        El  libro original, lo leyó el Mayor Juan Domingo Perón cuando estaba destinado en un Regimiento de la Patagonia y le fascinó de tal forma que empezó a publicarlo por parte en boletines regionales. "El Mayor Perón, en la bibliografía de su trabajo, cita el libro de 1918 del Padre Domingo Milanesio, entre otras obras consultadas.
        Su "Toponimia Araucana: " de 1935-36, fue escrita por motivos docentes para que los soldados, oficiales y suboficiales destinados en la Patagonia se informaran de los vocablos con que se topaban a diario”. Así se lo manifestó un día el propio autor en la residencia presidencial al entonces director general de Cultura, José María Castiñeira de Dios, mientras le mostraba los originales del texto que, por esa razón, no había sido editado como libro sino que, efectivamente, había sido difundido a través de los almanaques del Ministerio de Agricultura y Ganadería, de circulación gratuita en las zonas rurales.
        Esta conversación fue la que motivó su posterior publicación en los años 1950 y 1952 por parte de Cultura, con un estudio preliminar "El panorama lingüístico de la Patagonia y el trabajo del general Juan Perón", con algunas correcciones, si bien  los errores permanecieron como en el original del Padre Domingo Milanesio. Un ejemplo es de: “Melin”, (cuatro),  “Cué”, (papas, o patas, o lagunas). Algunos estudios posteriores certifican que Melincué significa: “Cuatro lagunas”.  (Cfr. Dudas de plagio, en La Prensa 15-12-1985; y en la Carta de lectores de la Nación. 27 de Noviembre del 2000).
 
       Otro lugar de visita imperdible es la Iglesia Nuestra Señora de Las Nieves.
 Al comienzo de estos tiempos, tribus Mapuches y Tehuelches compartían los inmensos espacios naturales de Argentina (sur). Doce años después de la fundación de la ciudad (1883), el Padre Salesiano Domingo Milanesio fundó y se instaló en  la Casa Salesiana con dos colegios, varones y mujeres,  con el propósito de evangelizar a los indígenas, alimentar y educar a sus hijos. (Padre Pscual Paeza. “Patiru Domingo”. Págs. 127-144. Año.1964).
         El Santuario inaugurado finalmente en 1999, nuevo, amplio, majestuoso, presenta uno de los más bellos ejemplos de esa rara mezcla de culturas que se dio en muchos sitios de la Patagonia: la religiosidad cristiana y la cultura mapuche. Los elementos que predominan son la madera y la piedra de la región, y también una rara utilización del vidrio y los vitrales, que le da un ambiente casi mágico.
      
        Allí se encuentran los restos del padre Domingo Milanesio, “Patiru”, el primer cura salesiano en evangelizar en la zona en 1892 y en instalarse definitivamente en 1895; también reposan las reliquias de la Beata Laura Vicuña, emblema de la localidad.
         El Volcán Lanín es uno de los grandes atractivos de la zona. (Patagonia argentina.com)