MANUEL BELGRANO Y LAS ESCUELAS. 19 - 04 - 2017..

Manuel Belgrano y las Escuelas. 
Carta de Lectores del Diario La Capital, -destacada- publicada el 19 - 04 -2017.
Celebramos  el 20 de Junio del 2017,  el Sexagésimo Aniversario de la Inauguración del Monumento Nacional a la Bandera en Rosario junto al Río Paraná y  recordamos que el mismo año fue  creado el Instituto Belganiano de Rosario, con el fin de fomentar la difusión de los ideales y de las acciones del General Manuel Belgrano, quien fue Abogado, Secretario del Consulado del Virreinato del Río de la Plata en Buenos Aires, integrante de la Primera Junta de Gobierno de 1810, Militar, Economista, Periodista, Creador de Escuelas Primarias, Secundarias, de Dibujo y Arquitectura, de Náutica, de  Agricultura con sus respectivos Reglamentos, fomentó la Construcción de Puentes, Caminos, Aguadas, creó un Seguro “La Confianza”, 1796, para capitales netamente criollos, para los timoneles , navíos y contra los accidentes en general.
Belgrano al mando de un Regimiento en Rosario, para proteger las costas del Río Paraná,  Creó la Bandera Celeste y Blanca, el 27 de febrero de 1812 y en el Norte al mando del Ejército Nacional, defendió la integridad Territorial,  por todas esas actividades se lo consideró Héroe Nacional.        
Como Estadista, tuvo primordial preocupación por la Enseñanza y la Educación de las  nuevas generaciones y dijo:"Sin educación, en balde es cansarse, nunca seremos nada”.
 Luego del triunfo de Tucumán 1812 y de Salta 1813, recibió  del Gobierno Nacional, 40.000 pesos fuertes en reconocimiento y él agradeció al Gobierno Central y  los donó para” construir Cuatro Escuelas Primarias en Tarija, Jujuy, Tucumán y Santiago del Estero”. “Estas regiones carecen de Establecimientos tan esenciales  a los habitantes,  donde  se enseñe a leer, a escribir, la aritmética, la doctrina cristiana, buenos modales  y los primeros rudimentos de los derechos y obligaciones del hombre en sociedad hacia ésta y el gobierno que la rija; también es necesario  inspirarles a  todos los niños, amor al trabajo, a construir su vivienda, a cultivar el campo, a criar el ganado  y  a las niñas además a cuidar el hogar, a coser, a bordar, todos alejados de la ociosidad y la ignorancia, tan perjudiciales  a los hombres como  a las mujeres”.
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 Belgrano fijó condiciones para el cumplimiento de su legado en un Reglamento fechado el 25 de mayo de 1813. Le pidió al Cabildo que dispusiera “la provisión de locales para el funcionamiento de las escuelas gratuitas –que se construyeran-.  “Asignó  10.000 pesos para cada una, que se pagara buena retribución al maestro  y  el resto que se destinara para proveer libros y útiles, tinta, pluma, papel a los niños pobres pues los padres no tienen como costearlo y emplear una parte para imprimir cartillas para que los agricultores sacaran mejor provecho de sus labranzas y  se destine en premios, si alcanzase".

 Belgrano se constituyó  en “el primer ciudadano propulsor y donante civil, de la educación popular en nuestra historia”. En el primer  Reglamento para esas Escuelas,  recordó: “Al maestro se le dará un lugar de privilegio en los actos públicos”.
Bartolomé Mitre  dijo sobre Belgrano:  “cultivó y supo adaptar al territorio del Río de la Plata, distintos aspectos de la vida social, política y económica, sobresalió como educacionista, literato, jurisconsulto, filántropo,  economista social y militar, en la Época Colonial y principio de la Independencia, su nombre estará asociado a todos los grandes pensamientos que se iniciaron a fines del siglo XVIII y principio del XIX para mejorar la condición política, moral y material del pueblo argentino”.
Belgrano en su Autobiografía declaró: “La Educación será el origen de todo progreso social, integrando la  razón con el trabajo, como resultado del proceso del conocimiento” y resumió:  "Sirvo a la Patria sin otro objeto que el de verla constituida, ése es el premio al que aspiro." 
Prof. Lic. Luis Angel Maggi. DNI. 6.433.410

LAURA VICUÑA, Ex Alumna de María Auxiliadora.1891-1904-



 Laura Vicuña -Ex Alumna de María Auxiliadora- 
Nació en Santiago de Chile el 5 de abril de 1891. Su padre, Don José Domingo Vicuña, pertenecía a una familia de la aristocracia chilena, de gran influencia política y alto nivel social. Su madre, Doña Mercedes del Pino, provenía de una familia humilde. Esta diferencia causa tensión entre Mercedes y la familia de José Domingo desde el principio.
Son tiempos de revolución en Chile. La familia, que apoya al gobierno derrocado, se ve obligada a huir de la capital y refugiarse a 500 km. al sur de la capital chilena, en Temuco. Su padre fallece pronto y queda su madre con dos niñas, Laura (de dos años de edad) y Julia, en la indigencia. Emigran a Argentina. El viaje es muy difícil y Doña Mercedes no tiene donde residir. Su situación de miseria hace que se ponga a vivir en unión libre con Manuel Mora, un rico y bruto terrateniente que le ofrece trabajo. Él es déspota, autoritario y está corroído por la soberbia y la sensualidad. En 1900, Laura es internada en el colegio de las Hermanas Salesianas de María Auxiliadora en el colegio de Junín de los Andes, gracias a la ayuda ecnómica de Mora. Pronto destaca por su devoción y hasta sueña con ser religiosa.
Cuando escucha de una maestra que a Dios le disgustan mucho los que conviven sin casarse, la niña cae desmayada de espanto. En la próxima clase, cuando la maestra habla otra vez de unión libre, la niña empieza a palidecer. Laura, a su tierna edad, se duele muchísimo cuando Dios es ofendido. Ahora comprende la situación de pecado mortal en que se encuentra su madre. Lejos de resentirse contra ella, decide entregar su vida a Dios para salvar el almade su madre.
Laura comunica sus intenciones al confesor, el Padre Crestanello, salesiano. Él le dice: "Mira que eso es muy serio. Dios puede aceptarte tu propuesta y te puede llegar la muerte muy pronto". Ella está resuelta en su ofrenda. Recibe la comunión a los diez años. Ese día se ofrece a Dios y es admitida como "Hija de María", consagrando su pureza a la Santísima Virgen María.
En el colegio, las demás alumnas la admiran como la mejor compañera, la más amable y servicial. Las superioras se quedan maravilladas de su obediencia y del enorme amor que siente por Jesús Sacramentado y por María Auxiliadora.
Cuando vuelve a casa para pasar las vacaciones, Mora trata de abusar de Laura, pero ella se resiste, por lo que es echada de la casa, a dormir a la intemperie. Después de esto, Mora no quiere pagarle la escuela, pero las hermanas la aceptan gratuitamente. Un día, cuando la niña vuelve a casa, Mora le da a Laura una paliza salvaje.
Hay una inundación en la escuela en pleno invierno. Laura pasa muchas horas con los pies en el agua helada, ayudando a salvar a las más pequeñas. Cae enferma de los riñones con grandes dolores. La madre se la lleva a su casa pero no se recupera.
Laura le dice a su madre: "Mamá, la muerte está cerca, yo misma se la he pedido a Jesús. Le he ofrecido mi vida por ti, para que regreses a Él". Le pide que abandone a Mora y se convierta. Ella le promete cumplir su deseo. Sigue orando y ofreciendo sus sufrimientos intensos por su madre. "Señor: que yo sufra todo lo que a Ti te parezca bien, pero que mi madre se convierta y se salve".
Entra en agonía y dice: "Mamá, desde hace dos años ofrecí mi vida a Dios en sacrificio para obtener que tu no vivas más en unión libre. Que te separes de ese hombre y vivas santamente". Mamá: ¿antes de morir tendré la alegría de que te arrepientas, y le pidas perdón a Dios y empieces a vivir santamente?
"¡Ay hija mía! Exclama doña Mercedes llorando, ¿entonces yo soy la causa de tu enfermedad y de tu muerte? Pobre de mí ¡Oh Laurita, qué amor tan grande has tenido hacia mí! Te lo juro ahora mismo. Desde hoy ya nunca volveré a vivir con ese hombre. Dios es testigo de mi promesa. Estoy arrepentida. Desde hoy cambiará mi vida".
Laura manda llamar al Padre Confesor. "Padre, mi mamá promete solemnemente a Dios abandonar desde hoy mismo a aquel hombre". Madre e hija se abrazan llorando.
Desde aquel momento el rostro de Laura se torna sereno y alegre. Ha cumplido su misión en la tierra. Ha sido instrumento fiel de la Divina Misericordia. Ha triunfado el amor. Recibe la unción de los enfermos y el viático. Besa repetidamente el crucifijo. A su amiga que reza junto a ella le dice: ¡Qué contenta se siente el alma a la hora de la muerte, cuando se ama a Jesucristo y a María Santísima! Lanza una última mirada a la imagen de la Virgen que está frente a su cama y exclama: "Gracias Jesús, gracias María", Muere dulcemente el 22 de enero de 1904, en Junín de los Andes (Argentina), cuando contaba sólo con 12 años.
La madre tuvo que cambiarse de nombre y salir disfrazada de aquella región para verse libre del hombre que la perseguía. Y el resto de su vida llevó una vida santa.
Los restos mortales de Laura Vicuña fueron trasladados en 1956 al Colegio Salesiano de María Auxiliadora de Bahía Blanca (Argentina).
La causa de beatificación se inició en Roma el 25 de febrero de 1982. El Papa Juan Pablo II la declaró Beata en 1988. Laura sigue concediendo en la actualidad muchos milagros. Los devotos esperamos que uno de estos milagros permita pronto su canonización.
Su fiesta se celebra el 22 de enero, día en que falleció.
ORACIÓN
Señor Jesús: Tú que concediste a Laura Vicuña la gracia de ofrecer su vida por la salvación del alma de su propia madre, concédenos también a todos nosotros la gracia de obtener buenas obras, la conversión y salvación de muchos pecadores. Amén.
Bibliografía
Boletín Salesiano, Biografías.Ejemplares.
Noriega, Néstor Alfredo.-SDB-. Biografía de Laura Vicuña, Conferencias "El fruto de la Educación Salesiana", 2001. Colegio San José de Rosario.