Padre Lino del Valle Carbajal, -1871 -1906- Misionero Salesiano.Escritor. Explorador.



   

1.-  Biografía. El  Padre Lino del Valle Carbajal, -1871 -1906-  Misionero
Salesiano,explorador del Norte Patagónico, es considerado el primero que escaló la mole de la Cordillera de los Andes,Monte Domuyo, sector neuquino en 1903, y llegó a la cumbre.  El l Coronel Manuel J. Olascoaga anticipó la exploración por sus laderas 21 años antes.

El Padre Salesiano Lino Carbajal, lo creían italiano, porque dominaba ese idioma;  pero había nacido en el Salto Uruguayo el 23 de setiembre de 1871. Estudió en Buenos Aires Magisterio y de inmediato la Teología. Fue ordenado sacerdote por monseñor  Juan  Cagliero,  en Viedma el 4 de abril de 1896.
 El Padre Lino Carbajal  fue destinado Misionero Salesiano, visitó distintas poblaciones, a caballo, en carro,  llevaba en su maletín solamente  un crucifijo y un Breviario, entró al desierto con la religión  cristiana, con el carisma de Don Bosco. Entre todos estos gigantes inmigrantes y nativos,  “aminaron y organizaron el desierto de los Aborígenes Pampas y Tehuelches, los conquistaron, convirtiendo a sus habitantes, algunos nómades, en pobladores de trabajo, de respeto y  en pueblos de verdadero progreso”. (Padre Rodolfo Ragucci, amigo de los Aborígenes).

 Este sacerdote Salesiano, investigador geográfico, Director del Observatorio Astronómico y escritor, falleció prematuramente en Buenos Aires en 1906.

 2.- Exposición en Turín, Italia.

“Desde que fue destinado  Misionero en la Patagonia, 1896, dirigió el  Observatorio Meteorológico de Viedma, hasta que Mons. Cagliero,  le encomendó la organización de la presencia de las Misiones Salesianas de la Patagonia, en la Exposición de las Misiones Católicas en Turín. Para ello Carbajal estudió en profundidad, la Historia y la Geografía de la  región,  revisó documentos de los investigadores  contemporáneos y recorrió el Territorio Patagónico, que  plasmó en un estudio científico de cinco volúmenes”. (Revista TEFROS – Vol. 5 N° 2 – Primavera.  2007. Copyright © 2005 – Registro de la Propiedad Intelectual Nº 617309 6)

Don Bosco, que había soñado la Región Patagónica, lo guiaba desde el cielo, quiso que su esfuerzo, y  su intensa obra fuera conocida en Turín, por iniciativa de Monseñor  Juan  Cagliero, jefe de la Primera Expedición de Salesianos, 1875.

3.- Plan de Acción.
Desde 1880, la Congregación Salesiana desplegó en la Patagonia Argentina un Proyecto Educativo y Misionero mediante la palabra y el ejemplo,  viviendo entre  los habitantes de esas regiones. Los Misioneros, construyeron viviendas, enseñaron a cultivar la tierra, a criar animales, construyeron caminos, puentes, escuelas en cuyo centro  levantaron siempre un mástil con la Bandera Argentina.
El Padre Carbajal, de origen uruguayo, conoció y se adhirió al Proyecto de Don Bosco para la Evangelización de la Patagonia que fue gestado en Italia entre 1870 y 1875, fueron los años de la llegada de los Salesianos a la Argentina. Este proyecto contenía un Plan de Acción de Evangelización de los habitantes de Sudamérica, que consistió básicamente en: "civilizar, convertir y educar", a los aborígenes.  
El objetivo, el pensamiento Teológico, Filosófico y Antropológico soñado por  Don Bosco, -1815-1888- lo  plasmaron los Misioneros en la Patagonia desde 1880 y luego en toda América. Este Plan de Acción fue  trasmitido a las personas de buena voluntad, con  un conjunto de valores cristianos,  en el mundo circundante. “Cada misionero desplegaba sus mejores talentos”.
 “Trataban  de entender  las culturas nativas sureñas, aprendieron su idioma, vivían con ellos  y en la educación aplicaron  el Sistema Preventivo”.
Constan  en los Archivos y Anales de la Congregación Religiosa de San Francisco de Sales, que ingresó en territorio rionegrino al finalizar la década de 1880, “los informes redactados por sus integrantes durante cada una de las numerosas misiones que practicaron, y que se constituyeron en una fuente de conocimiento regional  difícil de superar. No dejaron ningún tema sin desarrollar:  población,educación, salud,  flora, fauna, topografía, medio ambiente y meteorología, entre otros”.
Los misioneros más distinguidos en estas tareas fueron: Domingo Milanesio, Alejandro Stefenelli, Santiago Costamagna, Juan Cagliero, José Fagnano, José María Beauvoir, Alberto Agostini y  Lino del Valle Carbajal.
  Estudios posteriores pudieron rastrear “donde vivieron los misioneros,  el territorio  que recorrieron  y pudieron leer  en sus diarios de viaje todo cuanto observaron  y dejaron bien documentadas,    sus visitas  entre 1879 y 1899”.
Gran parte de los sitios arqueológicos y paleontológicos identificados antes del último cuarto del  siglo XIX “se localizaron en el sector costero e inmediaciones del Valle Inferior del Río Negro”. Sin embargo sabemos que los estudios continuaron en toda la Patagonia.
La oferta Educativa Salesiana iniciada el Siglo XIX fue inmediata y paralela a la estatal,  ramificadas  a zonas menos pobladas, contribuyendo a nacionalizar los Territorios de reciente incorporación a la Nación Argentina en 1879.  El tema prioritario fue  la Educación, entre los habitantes más desprotegidos,  en Oratorios, Colegios, Parroquias, Hospitales y Orfanatos en la Patagonia Continental, y Tierra del Fuego durante el período fundacional.

4.- El Coronel Olascoaga y la exploración de nuevos terrenos.
     

La ascensión  militar de Los Andes, 1882, dos años antes de la creación de los Territorios Nacionales de la Patagonia, tuvo un relato dramático, pues  a Olascoaga no le faltaba pluma. Su vida de privaciones y dificultades en toda la geografía no era un obstáculo sino su escenario de trabajo.  La altura, la nieve, la fatiga, las travesías,  de ríos y arroyos y escalamientos, eran para él lo cotidiano.
Había trabajado en la planificación y participado de la campaña al Río Negro del general Roca, en la que se desempeñó como Secretario. Y desde el 16 de noviembre de 1880, el propio Roca lo nombró jefe  de la Comisión Científica de exploración en la cordillera Sur con personal de la Oficina Topográfica Militar.
"Los militares que visitaron el volcán Domuyo  en febrero de 1882, hicieron dos ascensiones cerca de su cúspide; la primera por el lado Oeste, un  “espectáculo  sorprendente, a simple vista se dominaba toda la ramificación de la cordillera con sus ríos, valles, lagos del Oriente y las principales alturas en un radio de 35 leguas".
 El Coronel Manuel Olascoaga Secretario de la Expedición Militar, publicó 1882, una extensa obra "Estudio topográfico de La Pampa y Río Negro", fruto de las investigaciones de científicos a su mando que marcharon junto a la tropa;  fue hasta entonces la expedición más numerosa. La obra contenía las anotaciones tomadas durante el recorrido con hombres de ciencia, geólogos, botánicos  e ingenieros. (Cfr. Coronel Manuel J. Olascoaga en "Topografía Andina", editado en Buenos Aires, en 1901).

5.-  La expedición  del Padre Salesiano Lino del Valle Carbajal, naturalista y escalador andino.
 Cuando  apareció  a caballo, el Padre Lino del Valle Carbajal, sacerdote, Misionero, predicador, naturalista y geógrafo,  escuchó  lo que sostenían algunos vecinos instalados en la región desde 1870 y aún desde 1866, M. Gutiérrez, J. Ibáñez, que “muchos exploraron la región, pero nadie antes había trepado a esa codiciada cumbre del Pico Domuyo”; también lo atestiguaba  el mismo baqueano José. R. Flores, nativo,  que acompañaba al Padre Carbajal en su intento.
La segunda  ascensión a los Andes Patagónicos, fue  considerada la primera en llegar a la cumbre del Domuyo  que comandó y guió ya enfermo, el salesiano Lino del Valle Carbajal.  Ante los requerimientos de sus amigos: “cuídese Padre, descansemos un día más”, él respondía “quiero inmolar mi cuerpo por la gloria de Dios en lo alto de estas  montañas”. No quería dejar este mundo "sin dejar  la marca de  su profunda huella Misionera y Salesiana"

La descripción de este naturalista y geógrafo, enumeraba otros volcanes avistados hacia el Sur y una sucesión de cumbres hacia el Norte hasta el Tupungato. La hazaña realizada no parecía creíble, porque el primer gobernador del Neuquén hasta 1891,  no creía en plena  alborada del siglo XX, en esa  proeza. Pero para ahuyentar incrédulos aclaró que  ese espectáculo de la Cordillera, "lo hemos presenciado con un grupo de escaladores”.
“El cura investigador Lino Carbajal,  llegó hasta la cima, la coronó con su  sotana recogida con broches, botas altas  y suela con clavos. Los integrantes   del grupo expedicionario, algunos con carabinas,  dispararon al aire en la cumbre el 16 de noviembre de 1903”.

6.-  El cura salesiano explorador, la Santa Misa y los bautismos.
      Añado una anécdota enviada desde el Archivo del Museo Histórico Salesiano de la Patagonia Bahía Blanca, que dice así: "leyendo los diarios de viaje del Padre Lino Carbajal que andaba por el sur de Chubut, nos encontramos con esta pintoresca anécdota, escrita de puño y letra en un cuaderno: 
"Día 30 de agosto ¿1903? 
Celebro misa y bautizo en la comisaría a varias criaturas. Se reunieron unas 50 personas.
Por la tarde asisto a una insistente invitación a comer un cordero en el puesto de don Segundo Acosta, almuerzo que resultó el fiasco más completo, no solo para mi, sino para otros diez invitados. Se asó el cordero más flaco y chico que había. Asado chamuscado, sin sal, sin vino, sin yerba. Yo comí unos bocados a las 4 de la tarde y me volví a comer a casa un puchero".
(Cuadernos, memorias del Padre Lino, Archivo Histórico Patagónico Salesiano).
       Cada día el Padre Lino, iniciaba su camino de ascenso previa  celebración de la Misa, acompañado por el agradecimiento al Creador de tantas maravillas.
El propio Carbajal transcribió algunos párrafos del Coronel Olascoaga, en su libro "Por el Alto Neuquén",  editado por primera vez en 1906 por la Librería Salesiana del Colegio porteño Pío IX,  con un subtítulo: "La Ascensión al Pico Domuyo".
(Cfr. Todo reeditado por Siringa Libros, Neuquén, 1985).
 Carbajal dudaba que la ascensión que lo había precedido, coronara  la cumbre, aunque el salesiano admitía que "El Coronel Olascoaga ya ha visitado estos lugares". Para fundamentar su presunción sostenía en 1903, que "en Chos Malal y todo el curso del río Neuquén hasta Varvarco, este hecho no se conocía, y así es que todos  afirmaban que nadie ha subido al Domuyo".

7.- El padrino de ambos exploradores era el General Roca.

Ambas proezas tienen sus méritos. Primero: Se llama “El Domuyo”,  uno de los capítulos del informe del Coronel Olascoaga como Memoria del Departamento de Ingenieros Militares presentada el 30 de junio de 1883 al Ministro de la Guerra. El segundo demuestra que “Olascoaga estuvo en aquella mole bramante: se trata del borrador de una carta que escribió el 21 de marzo de 1882 a su "querido presidente" Roca. Allí describe andanzas de los Pincheyras por el Barrancas y de quienes se atrevieron a "traslomar el Domuyo", mole de la que le trasmite a Roca una de las etimologías probables de su nombre aborigen.  De paso por Curi-Chenque –dice-  "allí a media jornada siempre en dirección NE nos pusimos en las primeras faldas del Domuyo".
(Cfr. Archivo de Olascoaga, tomo II, documento 113).

8.- El Coronel Olascoaga y el Padre Carbajal.
 Olascoaga y Carbajal compartieron el mismo padrino de andanzas, el General Roca. El Padre Carbajal, contaba también con el patrocinio de Monseñor Cagliero, quien lo ordenó sacerdote en Viedma el 4 de abril de 1896, y fue asistido además por un decreto del Presidente Roca del 17 de Enero de 1903, con  un subsidio de 3.000 pesos para su recorrida por la Patagonia a los efectos de un “Estudio y para Mantenimiento del Observatorio Astronómico de Viedma”. También ellos conocían las leyendas de la montaña, “La Niña del Peine de Oro y otras”.  (Cfr. citado por el R.P. Raúl A. Entraigas. S.D.B.).
 Carbajal Lino, el cura andariego, vencedor del Domuyo, era más prolífico que  el Coronel Olascoaga en materia de escritura y descripción. Carbajal fue el organizador de un  “metódico y sistemático trabajo”,  con el fin de mostrar la presencia de las “Misiones Salesianas de la Patagonia”, en  la “Exposición Nacional de las Misiones Católicas en Turín” (Italia) en 1898, Hacia allá partió el 15 de mayo de 1898,  permaneció dos años, con paciencia ordenó en esa "terra lontana" los 5 tomos -casi 1800 páginas  impresas,  enciclopédicas- de su "Patagonia, Studi  generale" editado sólo en italiano en 1900. (Cfr. Turín, Italia, Escritores Salesianos).

9.- Cumbres, alturas y  termas.
El Padre Lino del Valle Carbajal, tenía  32 años cuando comenzó la gran gira que continuaría en 1904.  Pergeñó el libro:  “Nuevos apuntes” de los que quedan 40 libretas negras con su grafía. Era el Director del “Observatorio Meteorológico de los Salesianos en Viedma y Carmen de Patagones”, mantuvo esas funciones hasta su muerte, 1906.
 Con seguridad Don Bosco en sus “Sueños de la Patagonia”, como se leen en Las Memorias Biográficas, lo habrá visto caminar a este joven y entusiasta Misionero, cuando predecía: “Veo montañas, riquezas, misioneros  y muchas almas que salvar”. (Cfr, Archivo Histórico de la Obra de Don Bosco en la Patagonia).

Quedaron numerosos  registros de su espíritu emprendedor, en  los diarios y periódicos de la época donde se conservan sus pasos  y acciones, acompañados de su hermano Gumersindo y Santiago Fogiarini también presentes en la ascensión al Domuyo, cuando llegaron a las termas del  Copahue en el atardecer del 8 de febrero de 1904. Allí encontraron al Dr. Eduardo Talero, el colombiano Secretario del Gobierno neuquino que encabezaba el Dr. Bouquet Roldán.
“En los baños termales había unas 25 personas que tomaban sus baños y entre las que estaban "un capitán Quiroga, un alférez y ocho familias", escribía el Padre Lino Carbajal.  El presbítero Ernesto Szanto, anotó que “más tarde llegaron al lugar otros 50 visitantes y que, con Talero y el hacendado Ducasso, cabalgaron hasta el límite chileno”.
A las termas ya se peregrinaba desde tiempos lejanos, como al Lago Nahuel Huapi, “lo hacía el texano Jarred A. Jones,  con sus hijos y en donde hallaba alivio para la pierna que se había quebrado en Pulmarí”.
“La ascensión del Padre Lino del Valle Carbajal al Domuyo, hazaña  muy conocida en la Región del Neuquén, donde celebró la Santa Misa, merece una solemne y permanente evocación”. ( Cfr. Juarez. F. N. )

10.- El Misionero Lino Carbajal sostenido en la memoria de la Región Neuquina.

También menciona al Padre Carbajal, el escritor Sacerdote Salesiano Raúl Entraigas, quien  nació el 28 de Agosto de 1901, en el Fuerte San Javier, a tan sólo 30 kilómetros de Viedma, sobre la costa del Río Negro y falleció  a los 76 años en la ciudad de Buenos Aires en 1977.
Raúl  Entraigas, de apodo “el negro”, descendiente de un padre francés afincado en Río Negro hacia 1824, (Don Jean Entraigues, abuelo).  Raúl Agustín Entraigas, era el séptimo de los nueve hijos de Benigno Donato Entraigas, (padre),  descendiente de aquella familia francesa. Su madre Eusebia Linares Ureña, (de padre aborigen), “era una persona de fuertes vínculos con esta tierra,  descendiente de un cacique Tehuelche, conocía muy bien la zona” quien  recordaba al “Misionero joven enérgico, sufrido, filántropo, emprendedor, astrónomo y escalador”.

El Padre Lino Carbajal no solo quiso “conquistar las almas, con su testimonio, sino las alturas,  las nieves y los hielos eternos  que lo apasionaban”.Para que no lo olvidaran y continuaran su obra civilizadora y  misionera, otros escaladores, “escribía sin cesar y graficaba mapas de las regiones  descubiertas”.
 “Esta fue su forma de alabar al Creador de tantas maravillas”. (Padre Raúl Entraigas, “Las Misiones Salesianas”,  escritor y poeta).


11.- Bibliografía. Cfr .
1.-  Escritores Salesianos.  Lino del Valle  Carbajal. S.D.B. Uruguayo, naturalista y explorador de la Patagonia y de las tierras fueguinas.
Sus Obras: Le missioni salesiane nella Patagonia e regioni Magellaniche. Un volumen, 1900.
La Patagonia. Studi generali. Cuatro volúmenes. Torino, 1899-1900.
Por el alto Neuquén. Relato sobre la escalada del pico Domuyo y comprobaciones efectuadas con tal motivo.
2.- Coronel Manuel J. Olascoaga en "Topografía Andina", editado en Buenos Aires, en 1901.
3,- Padre Rodolfo Ragucci, S.D.B.  amigo de los Aborígenes. Las Misiones Salesianas.
4.- Padre Raúl Entraiga, S.D.B.  descendiente de Tehuelches. Las Misiones Salesianas en la Patagonia.
5. Bruno Cayetano, Sacerdote S.D.B.  Investigador, Historiador.  La Oba Salesiana en  la Patagonia.1970.
6.- Noriega, Néstor Alfredo. S.D.B.  Misiones Salesianas, 100 años en la Patagonia. Revista Didascalia. Rosario. 1975.
7.- Archivo Salesiano de la Inspectoría San Francisco de Sales, de Bs. As. 1875 – 1980-.
8.- Boletín Salesiano, Edición Argentina. Bs.As.
9.-  “El aporte científico de los Salesianos en la Patagonia: Lino Del Valle Carbajal”.
 10-  Boletín de la Fundación Ameghino, “Mundillo Ameghiniano”. Nº 16. Viedma, Río Negro.1986.
   



Padre Leopoldo Rizzi. - 1883 - 1973 - Sacerdote, Misionero, Director y Organizador de E.A.S.

Padre   Leopoldo   Rizzi. (Recopilación y publicación Rosario. 19 de Marzo del 2014)
Escuela  Agrotécnica   Salesiana "Don  Bosco". Uribelarrea, Provincia de Buenos Aires.

La Escuela Agrotécnica Salesiana "Don Bosco", es propiedad de la Institución http://www.easdonboscouribe.edu.ar/historia_archivos/image001.jpgSalesiana Nuestra Señora de Luján y fue fundada el 28 de enero de 1894.
La idea nació en una audiencia que tuvo Monseñor Luis Lasagna con el Papa León XIII. Su santidad lo había instado a la fundación de Escuelas Agrícolas en América para los hijos de los colonos italianos. Fue así que en los primeros días del mes de julio de 1893, durante un almuerzo el Padre Santiago Costamagna, Monseñor Lasagna, el señor Alejo de Nevares y Don Miguel N. de Uribelarrea, dialogaron sobre este tema. Ante esta noticia Don Miguel de Uribelarrea expresó que en su colonia, cerca de Cañuelas, había destinado un campo para tal fin. Allí mismo se concretó la creación de la primera Escuela de Agricultura Práctica del país, según la visionaria idea del Santo Padre León XII, quien promocionaba la creación de fuentes de trabajo y la educación como herramienta. (Encíclica Rerum Novarum, 1891)
La piedra fundamental fue colocada el 28 de Enero de 1894, durante una ceremonia que presidió el Obispo de Buenos Aires Monseñor Federico Aneyros, autoridades y el P. Valentín Cassini (que sería el primer director). Los padrinos fueron el Presidente de la Nación y su Sra. Esposa.
http://www.easdonboscouribe.edu.ar/historia_archivos/image002.jpg 
 Al principio comenzaron sus actividades como una simple Escuela Primaria en la que un grupo de niños realizaban algunas prácticas agrícolas.
En 1941 el Padre Leopoldo Rizzi, incorporó los estudios secundarios de agricultura. En 1962 se inició el Bachillerato Agrotécnico de 5 años y, posteriormente, en 1966 se comenzó a aplicar el Plan Nacional de Educación Agropecuaria con 6 años de duración.

 La oferta educativa de la Escuela Agrícola se ha extendido, primero a los jóvenes de las ciudades cercanas y en los últimos años, gracias a los progresos en los medios de transporte, a adolescentes de gran parte del conurbano, que se sienten atraídos por las particularidades de un Proyecto Educativo Pastoral basado en el Ideario Salesiano, en un ambiente caracterizado por la familiaridad, el contacto con la naturaleza y el crecimiento en la libertad responsable.

La experiencia alcanzada por la Institución Salesiana en esta particular modalidad, a lo largo de más de 120 años, es el fruto de la constancia y la vocación docente, criterio sustentado para la enseñanza de las ciencias y técnicas agropecuarias con el método didáctico-productivo y el carisma del Sistema Preventivo de San Juan Bosco.

El Ideario se concretó a través de una permanente integración de Teoría y Práctica en la que los alumnos tienen estrecho contacto con producciones agropecuarias y agro industriales en contexto real, bajo la guía de docentes especializados.
El Dr. Manuel Belgrano, Secretario del Consulado del Virreinato de Buenos Aires, 1796-1810, propugnaba "la creación de Escuelas Agrícolas para varones y mujeres, (creó varias), con el fin de ocupar a la juventud, sacarla de la ignorancia y producir los alimentos en estas tierras generosas". Para ello escribió algunos lineamientos como los que proponía el médico francés Quesnay,"para desarrollar el trabajo, la industria y el comercio, es necesario un pueblo bien alimentado, que sepa ahorrar y cuidar el medio ambiente".
San Juan Bosco Fundador de la Congregación Salesiana, 1814-1888,  organizó también en Turín, Italia, Escuelas de Artes y Oficios, para los niños y niñas desprotegidos y vulnerables".
En la Argentina con la llegada de los Salesianos Misioneros,1875, fueron creadas varias Escuelas Agrícolas, asistiendo a los hijos de los inmigrantes, en La Patagonia, La Pampa Húmeda, Cuyo y Misiones. En todos los  Establecimientos,  inician las actividades escolares con el  izamiento de la Bandera, luego se dirigen a sus lugares de trabajo. 

El 09 de Agosto del 2010, en los periódicos locales y en  INFOCAÑUELAS, publicaron algunas de estas ideas, que circulan entre los Ex alumnos e hijos de Ex alumnos, familiares y amigos.

En reconocimiento a dos personalidades de Cañuelas, se colocó el nombre de Padre Leopoldo Rizzi y Escribano Salomón Odessky a dos calles del barrio Los Fresnos. 

"Pasaron varias décadas para que el padre Leopoldo Rizzi y el Escribano Salomón Odessky recibieran un homenaje público por sus vidas dedicadas a la educación, a los jóvenes y las entidades intermedias de Cañuelas". El recuerdo y la gratitud de los Religiosos, los  Ex alumnos de Don Bosco y los familiares concretaron este reconocimiento a estos amigos filántropos, hijos de inmigrantes.

El sábado 7 de agosto del 2010, se le impuso su nombres a dos calles del  barrio Los Fresnos, una idea impulsada por Manuel “Lito” Odessky, hijo de Salomón, quien quiso unir en una esquina a dos hombres que proviniendo de religiones distintas (uno era católico y otro judío) fueron amigos entre sí e igualmente queridos por la comunidad.

Leopoldo Rizzi (más conocido como “El cura gaucho” por su costumbre de predicar con el Martín Fierro) nació en Cañuelas el 15 de noviembre de 1883 y falleció el mismo día de su cumpleaños, en 1973.
El Padre Leopoldo, alumno en el Colegio San Carlos de Buenos Aires, compartió las aulas con Ceferino Namuncurá, “El santito de las tolderías”. Ingresó al Seminario y fue ordenado sacerdote el 10 de abril de 1910.
En la década del 40 asumió la conducción del Colegio Salesiano Don Bosco de Uribelarrea y gracias a su gestión y compromiso logró refundar el establecimiento y evitar su cierre. Allí fue Director y Confesor hasta el día de su muerte.
Por otra parte Salomón Odessky nació en Carlos Casares el 12 de enero de 1907. Llegó a la ciudad como jefe del Registro Civil. Fue miembro de la Biblioteca Pública, Cruz Roja, miembro fundador del Rotary Club y de la Escuela Nacional. Fue presidente del Consejo Escolar, Bomberos Voluntarios, Club Artesanos y Club Estudiantes.
Realizó numerosas contribuciones a la comunidad, entre ellas la donación de terrenos para la Capilla del barrio Los Aromos, el Comedor Escolar Juan XXIII, las Escuelas 7, 15 y Don Bosco de Uribelarrea. En forma personal costeó muchísimas becas para que chicos y jóvenes de Cañuelas pudieras seguir estudiando. Falleció el 10 de junio de 1983.
Familiares, amigos, funcionarios, vecinos de Uribelarrea y  de alumnos de las Escuelas 7 y 15 y del Colegio Don Bosco participaron  en el acto realizado en Los Fresnos.
Silvia Gorostidi de Marcos, Tomás Riva y Nelia Curone hablaron sobre los homenajeados en tanto que el poeta Néstor Mori recitó su poema “Un cura gaucho”.


El presidente del Rotary de Cañuelas, Mario Morrone y otros miembros rotarios descubrieron una placa en recuerdo de Salomón, mientras que se leyó un aforismo enviado por el escritor José Narosky –amigo de la familia Odessky- que bien resume la personalidad de los homenajeados: “Más grande el hombre, menos se hace notar”.- 

Bibliografía.

Cfr. Infocañuelas. Periódicos de la Región. Boletín Salesiano, Edición Argentina.
       Entrevistas con Religiosos, Ex alumnos y amigos de la Obra Salesiana.
        Cfr. ACTA FUNDACIONAL de la Escuela y entrevistas con Religiosos y Ex alumnos. Censos de la Institución Salesiana.
       Boletín Salesiano, Edición Argentina.