RECTOR MAYOR Juan Edmundo Vecchi. 1931 - 2002,

Juan Edmundo Vecchi Monti
El Padre Juan Vecchi, (pronunciado "Vequi") nació en Viedma el 23 de junio de 1931 y era sobrino del Coadjutor, Beato Artémides Zatti.
Sus padres eran Albino Vecchi y María Monti, ambos nacidos en Italia, emigrantes,  llegados al Cono Sur hacia finales del siglo XIX  procedentes de la Emilia Romagna, donde se encuentran las ciudades de Parma y Bologna; pero se conocieron y se casaron en Argentina.
Juan Edmundo fue el séptimo y último de los hijos. Sus primeros estudios los realizó en el Instituto Don Bosco de Viedma,1937, con las vivencias de esa Comunidad Educativa,  decidió seguir la vocación religiosa con los salesianos. En 1942 ingresó a la Escuela Salesiana de Fortín Mercedes en donde comenzó su contacto con las Obras de Don Bosco,-Grupos Juveniles, Oratorio Festivo, Parroquia-.
El 29 de enero de 1947 ingresó al Noviciado Salesiano y el 28 de Enero de 1948 concretó sus primeros votos religiosos. Adelantó sus estudios eclesiásticos en el Teologado Salesiano de La Crocetta, de Turín (Italia) a partir de 1954 y recibió el Orden Sacerdotal el 1 de julio de 1958.
Terminada su formación religiosa y sacerdotal, regresó a la Argentina para trabajar en Viedma, entre los años 1958  y 1961 como catequista en el Aspirantado Salesiano de Fortín Mercedes; desde 1962 a  1965 fue el Director del Colegio Domingo Savio de Bahía Blanca. Al año siguiente 1966  hasta 1971, asumió como Director del Centro de Formación para salesianos jóvenes.
En 1972 Don Ricceri, desde Turín, lo destinó Superior Regional para Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay, cargo que ejerció hasta 1977. Posteriormente fue promovido al cargo de Consejero Mundial para la Pastoral Juvenil en Roma en cuyo puesto estará hasta 1990. Estrecho colaborador de la conducción salesiana, en  1995 fue  nombrado Vicario del Rector Mayor Don Egidio Viganó; en la práctica ejerció el gobierno de la Congregación durante los últimos meses de vida del mismo, allí su figura se hizo promimente durante los últimos meses de convalecencia de éste.
El 20 de marzo de 1996  fue electo el VIII Sucesor de Don Bosco en el XXIV Capítulo General de los Salesianos cuyo tema central, estuvo dedicado a: “ los Seglares y Laicos, parte fundamental para la continuación de la Catequesis y la Educación”.
Este sacerdote salesiano nacido en la Patagonia Norte, hijo de inmigrantes italianos en la Argentina, se desempeñó en el cargo de Rector Mayor de la Congregación Salesiana de Don Bosco entre 1996 y 2002, tiempo en el cual se constituyó como el VIII sucesor de Juan Bosco en el gobierno de la segunda comunidad religiosa masculina de la Iglesia Católica.
 “Tenía reconocimiento eclesial mundial, cuando fue nombrado Rector Mayor. Entre los Salesianos se lo recordaba como la mano derecha de su antecesor con profundos conocimientos y experiencias en el campo de la Pastoral Juvenil Salesiana, donde dejó una prolífera y valiosa documentación escrita”.
En sus visitas a las Casas Salesianas del mundo, “procuraba encontrarse con los agentes de pastoral y los laicos, -la Pastoral Juvenil Salesiana-, a quienes daba gran importancia y a los que dirigía valiosos mensajes formativos que partían de su propia experiencia y conciencia como educador”. Insistía sobremanera en “la comunicación dentro de la misión salesiana, el anuncio y la evangelización”.
El 25 de enero de 2002 falleció Don Vecchi en Roma a causa de un tumor cerebral y fue sepultado en las Catatumbas de San Calixto, las cuales están bajo cuidado de la Congregación Salesiana. Tenía tan sólo 70 años de edad y moría en ejercicio del cargo. Al igual que él hizo con su antecesor, su periodo de gobierno sería terminado por su Vicario General, el hoy obispo Monseñor Luc Van Looy hasta la celebración del siguiente Capítulo General que él mismo alcanzó a convocar.
Magisterio desde su enfermedad
Desde una profunda realidad existencial imbuida de valores cristianos, Don Juan Vecchi describió tres etapas de la vida:
1.- “La etapa de la apreciación de la vida”.  2.- "Cómo emplear el don la vida y los talentos”, que es la parte de las decisiones. 3.- "Cómo entregar la vida" que es la del sacrificio.
Don Vecchi envió numerosos mensajes durante el periodo de convalecencia; pero el más destacado fue la carta "enfermedad y ancianidad en la experiencia salesiana".  
“La enfermedad me llegó de improviso, en el corazón del Ministerio que me fue confiado por la Providencia. Había proyectado muchas cosas para el tiempo de mi Rectorado, pero me llegó esta sorpresa. La gracia de Dios y la caridad de vuestra oración me han ayudado a vivir este cambio vocacional, que me llamaba a servir al Señor de una manera nueva”.
El Rector Mayor enseñó el valor de la ancianidad y aunque la Congregación de Don Bosco está dirigida a la misión juvenil, “es necesario tener en cuenta la realidad: "a envejecer bien se aprende desde jóvenes", -decía-. Se identificó a sí mismo con los ejemplos de “santidad salesiana que han tenido que ver directamente con la realidad de la enfermedad como Artémides Zatti, coadjutor enfermero y Luis Variara, apóstol de los enfermos de lepra”.
Acontecimientos
Entre los acontecimientos más destacados durante su mandato encontramos:
1. La beatificación de su tío, el Salesiano Coadjutor Artémides  Zatti, ocasión para la cual escribió un mensaje, aunque murió antes de ver la ceremonia que presidió S.S. Juan Pablo II el 14 de abril de 2002. En el siguiente texto, Don Vecchi describía a su tío Zatti y nos muestra la manera brillante de escribir del Rector Mayor argentino:
“Corrían anécdotas, dichos, impresiones y juicios: un mosaico lleno de color construido con gestos y hechos cotidianos, a través de ellos la gente llegaba a una conclusión: Don Zatti era un santo. No necesitaba un concepto elaborado de santidad,  ni complicados criterios de discernimiento. Era una intuición popular que descubría en la caridad compasiva y pronta, como la del Buen Samaritano”.
2. El  Centenario de la llegada de los salesianos a Bolivia en 1996, motivo por el cual el Rector  Mayor visitó las obras salesianas en este país.
3. El  Centenario de la llegada de los salesianos a El Salvador, visitó a ese país y fue recibido por miles de jóvenes en el Palacio de los Deportes el 18 de agosto de 1998. Su mensaje fue: “Hago un llamado a los jóvenes para que vivan como María y se pongan al servicio completo del Señor. Dejen entrar a Cristo en sus corazones y mantengan viva la llama de la esperanza en ellos”.
4.- El 13 de junio de 1999,  participó de la beatificación de 108 mártires polacos en Varsovia, entre los cuales se encontraba el sacerdote salesiano José Kowalski y cinco jóvenes del Oratorio Salesiano de Poznan.
Cfr.
1.       Carta del Rector Mayor: Enfermedad y ancianidad en la experiencia salesiana, Roma, 15 de agosto de 2001.
2.       NORIEGA, Nestor Alfredo: Artémides Zatti: el Hombre, el Apóstol, el Santo". Ediciones Didascalia, Rosario, 1997, pag. 5 y 9.

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