La Fe en el Señor nos salvará. - 07 - 12 - 2020.-

La Fe. Jesús y los Milagros.- - 07 - 12 - 2020.-Explicación. Opus Dei al día.- - Un día Jesús estaba enseñando y estaban también sentados ahí algunos fariseos y doctores de la ley, venidos de todas las aldeas de Galilea, de Judea y de Jerusalén. El poder del Señor estaba con él para que hiciera curaciones. Llegaron unos hombres que traían en una camilla a un paralítico y trataban de entrar, para colocarlo delante de él; pero como no encontraban por dónde meterlo a causa de la muchedumbre, subieron al techo y por entre las tejas lo descolgaron en la camilla y se lo pusieron delante a Jesús. - Cuando él vio la fe de aquellos hombres, dijo al paralítico: “Amigo mío, se te perdonan tus pecados”. Entonces los escribas y fariseos comenzaron a pensar: “¿Quién es este individuo que así blasfema? ¿Quién, sino sólo Dios, puede perdonar los pecados?” Jesús, conociendo sus pensamientos, les replicó: “¿Qué están pensando? ¿Qué es más fácil decir: ‘Se te perdonan tus pecados’ o ‘Levántate y anda’? Pues para que vean que el Hijo del hombre tiene poder en la tierra para perdonar los pecados –dijo entonces al paralítico–: Yo te lo mando: levántate, toma tu camilla y vete a tu casa”. El paralítico se levantó inmediatamente, en presencia de todos, tomó la camilla donde había estado tendido y se fue a su casa glorificando a Dios. Todos quedaron atónitos y daban gloria a Dios, y llenos de temor, decían: “Hoy hemos visto maravillas”. Palabra del Señor. Gloria a Ti, Señor Jesús!.- (san Lucas 5: 17-26).- 🎚 - El profeta Isaías, nos sigue exhortando a la espera de su anuncio. Hoy nos dice: “He aquí que su Dios, vengador y justiciero, viene ya para salvarlos’. Se iluminarán entonces los ojos de los ciegos y los oídos de los sordos se abrirán. Saltará como un venado el cojo y la lengua del mudo cantará”. Es importante ver como presenta Isaías al Señor que viene a salvarnos: “Dios vengador y justiciero”. ¿Cuántas veces escuchamos predicaciones en este tono refiriéndose al Señor? ¿Cuándo nos han hablado en alguna catequesis de un Dios vengativo si sabemos que Dios es amor y todo lo perdona? Pues bien. Es importante conocer correctamente la figura de Dios. ¿Dios es amor? Por supuesto que es amor. ¿Dios es misericordioso? por supuesto que es misericordioso. ¿Entonces por qué hoy nos habla Isaías de un Dios vengador y justiciero? Porque el amor y la misericordia de Dios tienen límites. Porque Él “no quiere la muerte del pecador, sino que se convierta y se salve” (cf. Ezequiel 33: 11) Y por esa razón permite que pasemos por ciertas tempestades, para que acudamos a Él con plena confianza. -Santa Faustina de Kowalska, apóstol de la Divina Misericordia, recibió de Jesús una serie de mensajes que están documentados dentro de la Iglesia. Dentro de sus mensajes nos dice Jesús: “aprovechen este tiempo de misericordia, pues el que no quiera pasar por la puerta de la misericordia tendrá que pasar por la puerta de la justicia”. Estas palabras de Jesús que nos revela Santa Faustina, son el mismo mensaje que Jesús nos trasmite en Lc. 12, 54 – 59: “Jesús también dijo a la gente: «Cuando ustedes ven que las nubes se levantan por occidente, dicen que va a llover, y así sucede. Y cuando el viento sopla del sur, dicen que va a hacer calor, y lo hace. ¡Hipócritas! Si saben interpretar tan bien el aspecto del cielo y de la tierra, ¿cómo es que no saben interpretar el tiempo en que viven?» (Los signos de los tiempos). «¿Por qué no juzgas por ti mismo lo que es justo?. - Si alguien te demanda y vas con él a presentarte a la autoridad, procura llegar a un acuerdo mientras aún estés a tiempo, para que no te lleve ante el juez; porque si no, el juez te entregará a los guardias, y los guardias te meterán en la cárcel. Te digo que no saldrás de allí hasta que pagues el último centavo.»” Signos de los tiempos. Estamos aún a tiempo de recurrir a la Misericordia del Señor. No dejemos que estas palabras del Señor “¡Hipócritas!” sean para nosotros. Estamos viviendo la pandemia. ¿Cuánto tiempo tenemos para reconciliarnos? Conozco muchas personas que hace unas cuantas semanas parecían totalmente sanos y hoy ya no están con nosotros. “¿Por qué no juzgas por ti mismo lo que es justo?” Tenemos conciencia y sabemos que tan justas o injustas son nuestras acciones. La conciencia nos dice que tan cerca o lejos de Dios estamos. La conciencia es un santuario inviolable donde solamente entra Dios y la misma persona. Nadie más. ¿Por qué no juzgas por ti mismo lo que es justo? Y como dice Jesús. Ponte de acuerdo con tu adversario. ¿Cómo queremos tener a Dios: cómo amigo y como Padre o como adversario? Como adversario será vengador y justiciero. Como Padre y como amigo será misericordioso y nos protegerá para que seamos de los que podamos caminar por la calzada de la que nos habla Isaías: “Habrá allí una calzada ancha, que se llamará ‘Camino Santo’; los impuros no la transitarán, ni los necios vagarán por ella”… -Hay una canción de Leonardo Fabio (QEPD) de los 60’s, principios de los 70’s que en una parte dice: «Hoy yo quiero a todo el mundo y el mundo me quiere a mí». Cuando una persona está enamorada proyecta la alegría de vivir y esto mismo es lo que percibe de todos. Su alegría la quiere compartir y quiere todos se alegren junto con él. Eso mismo sucede cuando una persona tiene un encuentro con Jesús y experimenta su misericordia. Se desborda su alegría, da gloria a Dios y canta alabanzas porque la boca habla de lo que está lleno el corazón. Porque si en el pasado, podía ser que su vida fuera camino a la perdición y pasar por la justicia de Dios, se ha convertido y ha encontrado la Misericordia de Dios. En el pasaje del Evangelio que hoy vemos están reflejados los dos tipos de personas de las que hemos hablado en la reflexión. La de los fariseos que retan y confrontan a Jesús, y la de un paralítico que ayudado por sus compañeros vencen todo tipo de obstáculos para tener ese encuentro cara a cara con Jesús y por fe tiene una conversión física y espiritual. Los fariseos molestos porque encuentran en Jesús una amenaza a su poder tanto social como económico, y eso los lleva a actitudes de soberbia, arrogancia, y prepotencia, y que por eso mismo Juan Bautista les advertía de la sentencia que habrían de recibir. Sentencia quizá de justicia y venganza si no se convierten. - Por el contrario vemos la humildad del paralítico y sus compañeros que lo llevan a una conversión física y espiritual. Primero Jesús lo sana espiritualmente al perdonarle sus pecados. Y posteriormente lo sana físicamente de su parálisis. Esto lo lleva a cantar y alabar a Dios. Quien se encuentra con Dios, se humilla y reconoce su necesidad es enaltecido. ¿Cuál es la actitud con la que buscamos a Jesús? ¿Con soberbia y arrogancia como los fariseos por nuestro poder y posición social y económica aquí en la tierra, o como la del paralítico que reconoce humildemente su necesidad? - Vamos a seguir viendo la invitación a una conversión. Una conversión auténtica. Esta conversión no sólo debe ser intelectual, sino espiritual. Esa conversión espiritual que nos reconcilia con Dios y nuestros pecados son perdonados a través del Sacramento de la Reconciliación, y proyecta nuestra vida con un entusiasmo de vivir y así como el paralítico que fue sanado, también cantar y alabar a Dios porque nos ha hecho un hombre nuevo. Ese es nuestro Dios que viene a salvarnos. Que quiere encontrar en nosotros un corazón dispuesto a recibirlo. Un corazón renovado donde le permita al Señor habitar. Ese es nuestro Adviento Místico. ¡Todo por Jesús, nada sin María!. - Oremos. - Señor, que gran fe tenían esos hombres del evangelio. Aumenta mi fe para poder confiar en Ti siempre sin importar la dificultad que se me presente. Que gran poder tiene la oración de intercesión. Por eso también te pido Madre Santa del Cielo que nunca dejes de orar por mi. Hasta ahora tal vez no he sido tan buen hijo. Poco me acuerdo de ti y te doy pocas muestras de cariño; pues tú también eres mujer y te gustan las pequeñas muestras de afecto. Ayúdame a ser más cercano. Jesús, Tú eres hijo de María. Tú sí sabes amarla como madre tuya que es. Que aprenda de ti las palabras, el cariño, la confianza que debo tener en Ella. Tú me la diste como Madre al pie de la cruz, que sea yo agradecido por tan hermoso regalo. Amén!

No hay comentarios:

Publicar un comentario